La historia de la publicidad, es la historia de las acciones emprendidas por personas que buscaban disponer de una forma de comunicación que sirviera para dar a conocer lo que ofrecían a su comunidad y, si fuera necesario para persuadir de ello.
La publicidad en cierta forma, es una parte inevitable de nuestra vida diaria. No importa donde estemos, la publicidad está con nosotros- educándonos, induciéndonos a comprar nuevos productos y servicios, o como la propaganda incitándonos a abandonar malos hábitos, como el consumo de drogas o animándonos a apoyar alguna causa noble o algún candidato político. Es obvio que la publicidad no siempre ha ocupado el lugar que ocupa en la actualidad como un elemento principal de los negocios modernos. La necesidad de hacer publicidad parece ser parte de la naturaleza humana, y esto se ha evidenciado desde los tiempos antiguos.
Las nuevas tecnologías y soportes están revolucionando la forma de hacer publicidad y, con ello, los negocios.
La publicidad interactiva es aquella que utiliza medios interactivos para influir en la decisión de compra de los consumidores. Suele utilizarse en Internet, televisión y teléfonos móviles, lugares en los que el usuario pueda empapar la información que recibe.
Gracias a la tecnología las publicidades que solemos encontrar, por ejemplo, en las paradas de bus son más interactivas que nunca.
No hay duda de que los medios publicitarios tradicionales: prensa, radio, televisión, carteles, etc. desarrollan un papel muy importante en la comunicación. Pero actualmente se está dando una combinación interesante entre nuevas tecnologías y pensamiento creativo, lo que ha abierto un abanico de nuevas posibilidades comunicativas en las que el receptor ha pasado a ser un usuario interactivo con mayor participación en el proceso de comunicación, dejando atrás el papel de simple espectador.
Esta publicidad interactiva tuvo lugar hace un par de años, y a pesar de no tener soporte tecnológico se las arregló para atraer la atención de la gente con una simple pregunta: ¿Qué harías si tuvieses un último minuto de vida? El anunciante era Lastminute.com, un sitio para planificar viajes.
Este tipo de publicidad exige que el consumidor sea un receptor activo, a diferencia de los medios tradicionales, y sea él quien desencadene la publicidad, elija entre diversas opciones o pida más información, ya que permite al anunciante involucrar al receptor en una experiencia más personal que la publicidad convencional.
Nota: Partes de esta información vienen de diversas fuentes y opiniones personales.
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